Con frecuencia nos preguntan por el origen de la SILLA VITORIERA, típico mueble tradicional y muy popular en la isla de Tenerife. A menudo tenemos alguna en el taller y en las clases que impartimos. Hace poco publicamos en nuestro Instagram una pequeña reseña sobre éstas sillas, el proceso de restauración realizado por una de nuestras alumnas de dos sillas «desahuciadas» de herencia familiar, y les contamos un poco de su origen e historia (comprometiéndonos a ampliar información en nuestro blog).
¡Lo prometido es deuda!
Un poco de historia…
Origen de la Silla Vitoriera: La SILLA CHIPPENDALE.
En este artículo trataremos de explicar de manera sencilla cuales son los orígenes de la silla Vitoriera canaria y para ello nos tenemos que remontar a los antecedentes de la silla Chippendale…
El siglo XVIII fue el origen de lo que hoy denominamos «Estilo Inglés».
A comienzos del siglo el mobiliario inglés comienza a imponerse en Europa, después de tantos siglos de dominio del mobiliario y los estilos franceses con todos sus reyes. Es con el Estilo Reina Ana donde ya podemos ver los inicios que marcarían dicho estilo inglés y que más tarde consolidarían diseñadores y ebanistas como Thomas Chippendale.
El Estilo Reina Ana se caracteriza por su sencillez, sobriedad y elegancia, por la búsqueda de la comodidad y el confort, y por el uso de la madera de nogal. Hasta ahora las sillas apoyaban en patas rectas y es con éste estilo cuando aparece por primera vez la línea curva, de influencia oriental, en patas denominadas patas cabriolé que terminan en una especie de almohadilla o «pad foot«.
Otras características de las sillas Reina Ana son respaldos curvos con hombros ligeramente marcados, pala central o «splat» en el centro del respaldo, con perfil de vaso o jarrón estilizado y travesaños uniendo las patas en forma de H.
En la ilustración las podemos ver, aunque las patas son diferentes ya que este estilo va evolucionando durante el barroco inglés y continúa desarrollándose con los estilos posteriores (Jorge I y II o «Georgiano») con la aparición de la famosa pata cabriolé en forma de garra sobre bola o «ball and claw foot«, también de influencia oriental y que todos identificamos como típica del «mueble inglés».
Estas influencias eran debido al aumento del comercio de Europa con Oriente, que desarrolló en la Inglaterra de mediados del s.XVIII un gran entusiasmo por las formas y los motivos decorativos inspirados en oriente, así como por los muebles lacados precursores del progresivo cambio de gusto por los acabados barnizados en lugar de encerados.
También el comercio con las colonias americanas traería a Inglaterra nuevas maderas como la Caoba, que iría sustituyendo progresivamente a la madera de Nogal.
El Estilo Chippendale se desarrolla durante el barroco y rococó inglés de mediados del s. XVIII. Es curioso comprobar que a partir de este momento los estilos ingleses comienzan a denominarse más por sus diseñadores que por sus reyes, comenzando por el famoso Thomas Chippendale. Ahora no voy a contarles la vida de este famoso diseñador y ebanista inglés, que para eso está la Wikipedia, pero si resaltar que fue el primero que dió el nombre a un estilo.
Su habilidad fundamental fue saber combinar los estilos anteriores con nuevas influencias, apoyando todo ello con un gran «ojo» comercial. En 1745 publica «The Gentelman and Cabinet-Maker’s Director» con un repertorio de sus diseños de muebles que se hizo muy famoso y contribuyó enormemente a extender su influencia no solo por todo el país, sino también por el resto de Europa y las nuevas colonias inglesas, y a democratizar el diseño del mobiliario.
En sus diseños Chippendale tuvo la habilidad de mezclar influencias y motivos decorativos de todo tipo según las tendencias y gusto de la época: georgianos, chinescos, góticos y neoclásicos; pero supo darles una unidad, unas formas y líneas tan elegantes que han perdurado hasta hoy día. Se pasó al uso de la madera de caoba para elaborar sus muebles, y poco a poco fue introduciendo los acabados con barniz de goma laca sustituyendo la tradicional cera.
Aunque realizó diseños para todo tipo de muebles, es con las sillas con las que alcanza su máxima personalidad. En ellas podemos ver que utiliza indistintamente la pata recta de sección cuadrangular unidas con travesaños en H como patas cabriolé terminadas en garras sobre bola con rodillas muy marcadas decoradas con tallas.
Pero sus diseños más interesantes y variados los encontramos en los respaldos de estilo plenamente rococó, con líneas curvas y sinuosas en forma de pagoda sobre montantes de líneas rectas ligeramente abiertos marcando los hombros. En el interior coloca una pala central o «splat» calada con diseños complicados y muy elaborados con motivos decorativos de todo tipo: elementos góticos como rosetones y arcos conopiales, lazos y cintas rizadas muy del gusto rococó, conchas y grecas, dibujos curvos en forma de C…
El estilo de Chippendale iría evolucionando poco a poco desde el rococó hacia el neoclasicismo con la llegada del rey Jorge III (1760) y la influencia de otro gran diseñador inglés: Robert Adam.
La influencia de Chippendale llegó hasta las colonias inglesas gracias a la gran difusión que sus diseños tuvieron con las diferentes reediciones del «Director». En el caso de la isla de Menorca, la ornamentación de los muebles resulta mucho más sencilla y presentan algunas variaciones con respecto a los diseños de Chippendale.
En general las palas centrales llenas de cintas talladas son sustituidas por palas lisas; los respaldos con curvaturas están adornados a veces con rosetas o conchas, también suelen ser más anchos en la parte superior y las patas traseras tienden a unirse en la parte inferior; presentan normalmente patas rectas y lisas, unidas con travesaños en H, decoradas en ocasiones con acanaladuras.
La silla que utilizamos para ilustrar el artículo corresponde a este tipo de diseño menorquín. Fue un regalo de una amiga inglesa y perteneció a su familia, así que le tengo mucho cariño. Se encontraba muy deteriorada por haber estado a la intemperie y su restauración fue muy laboriosa.
En el año 2013 salió publicada en el catálogo «Artesanía de La Laguna», editado por la Concejalía de Promoción y Desarrollo Local del Ayuntamiento de San Cristóbal de La Laguna con ocasión de la Feria de Artesanía «Aguere Artesana». Una preciosa iniciativa de la entonces teniente de alcalde Mónica Martín para promocionar la artesanía local.
En un segundo artículo les contaremos como llegó este estilo de sillas a las Islas Canarias y como su diseño evolucionó hacia la ahora conocida como SILLA VITORIERA.
Toda la información y las imágenes que ilustran este artículo han sido obtenidas de libros de consulta (somos analógicos, que le vamos a hacer…).
Bibliografía:
«El Mueble de Estilo Inglés. Desde los Tudor hasta la reina Victoria». José Claret Rubira Arq. Ed. Gustavo Gili 1967.
«Historia Dibujada del Mueble Occidental». Phyllis Bennett Oates. Celeste Ediciones 1995
